Zamba para olvidar.

La tarde se ha puesto triste,
y yo prefiero callar. 
¿Para qué vamos a hablar 
de cosas que ya no existen?
No sé para qué volviste, 
ya ves que es mejor no hablar. 
Qué pena me da saber que al final 
de ese amor ya no queda nada, 
solo una pobre canción da vueltas por mi guitarra.
Y hace rato que te extraña 
mi zamba para olvidar. 
Mi zamba vivió conmigo, 
parte de mi soledad.
No sé si ya lo sabrás, 
mi vida se fue contigo,
contigo, mi amor, contigo.
Que mal me hace recordar.