Una desición tomada. Perdoname flaco, sé que me hubieses bajado la luna si te la pedía, pero lamentablemente, nunca quise tu luna. Otra mujer te va a valorar más que yo, eso te lo aseguro; pero te doy un consejo: no quieras desenamorar a alguien de otra persona, porque nunca lo vas a lograr, tarde o temprano se te va a dar vuelta el juego, y te van a dejar. Un clavo no saca a otro, o por lo menos eso es lo que siento y lo que me pasa. Nadie hace olvidar a nadie otro amor, sólo uno mismo decide y olvida. Gracias por tus intentos, gracias por esforzarte como nadie para enamorarme; pero no lo hiciste y creo que nunca lo podrías haber hecho. Por eso me fuí. Gracias de todos modos, pero mi amor está en otra parte.