Nuestras primeras vacaciones juntos, las primeras de tantas. Perfectas desde que me subi al auto hasta que volvimos. Gracias por hacerme desenchufar del mundo, gracias por hacermela pasar tan bien, por cumplirme mis caprichos, por sorprenderme cada día, por dormirte abrazado a mi cada noche, por despertarme con un beso, por cuidarme. Pese a nuestro desperfecto en la ruta con el auto, en el que podríamos haber volcado, en el cual me asusté demasiado, creí que nos pasaba algo, me desperte sobresaltada. Que interesante que, en esos momentos, nuestro subconsciente actúe dejandonos ser nosotros mismos... Lo primero que pensé cuando me desperté asustada por el golpe, fue que si te pasaba algo me moría. Ese fue mi primer pensamiento, pero pese a todo ese miedo, me di cuenta que lo primero que hiciste es apretarme contra el asiento para que no me pase nada y tratar de frenar el auto con la otra mano. Gracias, gracias por eso, por cuidarme hasta en el peor momento. Cuando pasó el mal momento, te abracé con una mezcla de susto, felicidad y tranquilidad. Te vi bien y me calmé, por que, repito, si te pasaba algo me moría.
Gracias de verdad, por cuidarme, por hacer de estos cuatro días los más hermosos y eternos junto a vos.
Por más ruta juntos, y como vos dijiste, "el camino lo vamos escribiendo nosotros". Entonces, por más caminos por recorrer.
Te amo eternamente, sos mi mundo. ♥
